Los blogtrips son encuentros en los que una empresa (un ayuntamiento, una comunidad autónoma, una oficina de turismo) invitan a una serie de blogueros a visitar una zona y a disfrutar de la misma.
Normalmente se invita a blogeros de viajes o a otros bloggers de la zona o especialmente influyentes. Y en la mayoría de los casos son a gastos pagados.
A mi me han invitado a media docena de estos eventos en las últimas semanas. En general son eventos en los que te dan un programa con una serie de visitas y donde compartes ruta con otros blogueros.
Así a simple vista pinta bien. Es una forma de conocer una ciudad o una zona con otra gente para contarlo a los visitantes de este vuestro blog de viajes (el mejor blog de viajes diría mi madre).
El mundo de los blogs es una industria naciente, donde la gente se empieza a dar cuenta de lo importante (y barato) que es que alguien como hombrelobo saque el hotel o el restaurante de la empresa en el blog o que hable (bien) de ellos en Youtube y twitter. Y esto se nota en la proliferación de estos eventos.
Personalmente me parecen bien de salida. Pero en mi caso voy a limitar mucho mi asistencia a los blogtrips, por varias razones:
- El aceptar el blogtrip conlleva en muchas ocasiones una obligación a hablar del destino (no todos lo exigen, es verdad, pero cada vez es más frecuente incluirlo como condición sine qua non).
- El programa de lugares a visitar es muy apretado, con cosas para hacer a la hora y de la forma que quiere el organizador. Este es quizás el mayor de los inconvenientes desde mi punto de vista. Yo quiero decidir mis horarios, cambiar la ruta, disfrutar del recorrido y de la comida. Viajar, en una palabra, no que me lleven sino decidir lo que hago.
- Normalmente cubren todos los gastos del viaje (traslados, alojamiento,comidas). Pero no incluyen a la pareja de uno, ni se paga por el tiempo empleado. En mi caso, me supone tomar días de vacaciones o fines de semanas dedicados a ello.
- Te obligan a estar con otra gente, con otros blogueros, que puede ser un aliciente o un inconveniente. En mi caso es más un inconveniente que un aliciente. Uno es lobo solitario, y con perdón del resto de los blogueros de viajes, a mi lo que me apetece es viajar con mi pareja.
- En el caso de los vídeos de viajes, entiendo que lo que os apetece es ver vídeos de zonas especiales, bonitas, con sus alegrías, sus penas, lo mejor del lugar. Y eso es difícil cuando vas viajando en grupo.
Esto no quiere decir que no me interese conocer lugares. Todo lo contrario. Pero no en plan cordero. A mi me interesa lo que interesa a mis visitantes: que me dejen viajar, que me den alas, que me ayuden a conocer esos lugares especiales. Por eso sugiero a la gente que me inviten a hacer publireportajes de viajes en la web, con vídeos apoyados por el blog, Youtube, twitter y facebook. Porque mis vídeos los ven viajeros maduros, independientes y con una cierta capacidad económica. O al menos esos me dicen los lugares de estadísticas ….. 🙂
Te entiendo. A mí me pasa lo mismo en otros eventos 🙂 yo de grupo bloggers, así organizado, vamos por aquí, por allá, pues que no. A mí aire, vale 🙂
Está bién la idea 🙂
La verdad es que lo ideal sería que estos eventos fueran menos encorsetados, pero la mayoría así lo son.