El juego es muy simple: bota con tu muñeco de gelatina sobre las teclas y salta evitando caer en las teclas rojas.
Muy tonto, pero muy adictivo. Jelly Jumper.
Una mente dispersa
El juego es muy simple: bota con tu muñeco de gelatina sobre las teclas y salta evitando caer en las teclas rojas.
Muy tonto, pero muy adictivo. Jelly Jumper.